¿Sabías que la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo? Es por eso que debemos cuidarla muchísimo, ya que además es un indicador de nuestro estado de salud.


Es muy importante saber que no solo debemos prestar atención a los productos que nos ponemos en la piel, sino
tener cuidados especiales constantes (que podríamos estar dejando de lado por falta de información o recomendación).

 

Como muchas de ustedes saben, yo tengo rosácea y he tenido que hacer algunos cambios especiales para tratar esta inflamación que, cuando esta fuera de control, suele ser dolorosa y afectar nuestra autoestima.

 

Primero que todo, deben entender que la sensibilidad es una condición (y no un tipo de piel), por lo que distintos tipos de piel pueden ser sensibles.

 

Aquí les comparto los mejores consejos que me han servido para cuidar mejor mi piel sensible:

 

·      Evita las duchas calientes en casa, los cepillos de limpieza muy fuertes, exfoliantes abrasivos o toallas muy duras.

 

·      Limpia tu rostro con una toalla suave, húmeda con agua tibia, de preferencia con algún té antiinflamatorio.

 

·      Los productos para el cuidado de la piel que elegimos deben tener formulaciones simples, cubiertas de ingredientes activos naturales, sin fragancias y sin tensoactivos.

 

·      Si tu piel es muy sensible, puedes limpiar tu rostro con un aceite de jojoba, luego usar agua de rosas y humectar con un sérum de aceite de almendras.

 

·      El maquillaje es súper importante, así que revisa siempre la fecha de vencimiento. Los productos líquidos, en su mayoría, solo duran de 3 a 6 meses. Haz una auditoria mensual de los productos que usas para saber cuáles puedes seguir usando y cuáles no.

 

·      Existen pruebas de alergias que son increíbles. Estas pruebas identifican sensibilidades, alergias e intolerancias que pueden no aparecer en una prueba típica de Inmunoglobulina E (IgE), pero que todavía podrían desencadenar sensibilidades sistémicas y cutáneas.

 

·      Un médico o nutricionista funcional o integrativo, así como un médico neuropático, puede administrar e interpretar estas pruebas y crear un plan dietético personalizado, teniendo en cuenta los resultados.

 

·      La dieta de eliminación bajo la supervisión de un especialista puede ayudar muchísimo, ya que existen maneras de cuidarnos el rostro desde adentro, incorporando fermentos, probióticos, etc.

 

·      En muchos casos, el moho de las casas que se encuentran en el aire acondicionado, closets o estacionamientos pueden contaminarnos.

 

·      Recuerda siempre usar un filtro de agua y aire. La contaminación del aire en interiores, así como el cloro y otras toxinas en el agua del caño puede contribuir a la sensibilidad de la piel. Puedes empezar con los filtros de agua de los caños, poco a poco, y continuar con filtros en las duchas.

 

·      Limpia tus brochas de maquillaje, cambia constantemente las sabanas, sobretodo las fundas de las almohadas, toallas y cotton pads desmaquillantes. Estos objetos pueden albergar bacterias que sensibilizan la piel como moho y otros microbios.

 

¡La piel siempre nos está mandando mensajes, así que estemos atentos a lo que nos dice!

 

Cada vez que podamos controlar y eliminar lo que nos causa sensibilidad, significa que nuestro sistema inmune está fuerte y sano. No te preocupes, ya que las sensibilidades tienden a desaparecer.

 

¡Muy importante!

Las necesitades de la piel cambian con el tiempo, conócela para que puedas tomar medidas y ajustarla según lo que necesites.

 

¡Estamos juntas en esto!

 

Siempre,

 

Con amor,

 

Lou.

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